16 noviembre 2011

Santifica a Dios en tu corazón - Inma Martí

Tu corazón es Fuego Ardiente,
Igual que el Centro de la Tierra, igual que el Centro de nuestra Galaxia,
Igual que el Amor de Dios.
En tu interior hay una Fuente de Agua Viva.  ¡Dios mismo habitando en ti!
Santifica, pues, a Dios en tu corazón…
A Dios, que ya lo ha santificado… porque “nada en ti se hará sin ti”
A Dios, para quien tú ya eres Santa, Santo, por el amor que te tiene.
Como Él es Santo y quiere que lo santifiques viviendo plenamente el instante que te toca vivir.
En tu trabajo diario, mientras te esfuerzas, mientras gozas y te cansas…
¡Santifica a Dios, pues Dios te hace Amor, que te colma y te rebosa!
Preparando la comida para los tuyos, esperando a un amigo, acogiendo a quien no esperabas,
Besando a quien amas, tomando el autobús, planchando la ropa…
Ya duermas, ya veles, en la alegría, en la preocupación, en la sorpresa, en la rutina...
¡Santifica a Dios en tu corazón sencillo, hazte criatura, acoge en silencio!
Todo es sencillo, todo es plenitud.  ¡Dios lo ha santificado!  ¡Santifícalo, entra en su danza amorosa desde la eternidad!
Recibiendo el beso de quien te ama, cuidando a quien nadie ha cuidado, riendo con quien ríe, llorando con quien llora…
Acoge tu dolor, acoge todo lo que ES.  Deja fluir el Amor como la sangre por tus venas,
Como el Aire que te purifica y te renueva… no lo retengas… acoge el Silencio que hay en cada palabra, en cada señal… en cada corazón que llega a ti, bendecido y santificado por Dios!!!
Santifica en cada momento a Dios en tu corazón.  Esté como esté.  No lo quieras cambiar.  Pues Dios te ama ASÍ!!!  Y su SER es AMOR para ti y para TODOS.
¡¡Santifica a Dios y Ama mucho a todos los seres!!  Pues Dios te hace Amor, que te colma y te rebosa… y nada ni nadie podrá separarte de Dios!!
 
 

2 comentarios:

Lucía dijo...

Querida Inma:
Este poema de Santidad tiene que venir de alguien que ha vivido, que comprende desde el corazón, que incluye, que perdona. Es El en tu hermosa alma que hoy me trae su mensaje que me ubica, que me redime, que me hace saber y sentirme amada.

Gracias mil por dejar pasar este mensaje - así como estás, así como eres - en su Santidad!

Anónimo dijo...

Muchas gracias, Lucía.
Me preguntaba días atrás: ¿Cómo puedo yo santificar a Dios? Si Él es el Santo…
La respuesta viene cuando me sitúo “en mi corazón” ahí siento que he de participar, que Dios me invita a estar con Él, a estar presente,atenta... entonces es cuando comienza una preciosa historia en que aprendo a dejar que Dios sea Dios… y me maravillo ante todo lo que Es, sin querer cambiar nada. Sólo desde la hondura del silencio, comprendo lo que soy y comprendo que en la realidad hay gozo, hay dolor, hay generosidad, hay injusticia… y en la medida en que no pretendo más que aceptar y amar todo lo que ES, entonces puede surgir la Novedad.
“Algo nuevo está brotando”…
Inma.