La pasividad en la meditacion es llegar al estado de la plenitud del ser..Despojarnos de todas las dificultades que podamos tener nos lleva a abrirnos y a entrar en armonia con nuestro señor..el hijo encarnado de Dios. La meditacion es la forma de vaciar nuestro corazon y nuestra mente de todos esos deseos indeseables para poder entrar en la plenitud de Dios. Como dijo San Pablo...no se amolden al mundo actual sino sean transformados mediante la renovacion de sus mentes asi podremos comprobar cual es la voluntad de Dios...
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1 comentario:
Querida Mercedes:
El acto de "vaciar" en nuestra meditación cristiana, es sinónimo de "agrandar" - de hacer más grande ese "espacio" de nuestra percepción de lo divino.
Aunque es imposible vaciarnos totalmente, ese intento de regresar a la repetición de nuestra oración sagrada, es nuestro "abrirnos" para poder despertar a la Gracia de Dios.
Esta no se describe, no se limita, no se posee, no se negocía - es, pues su Gracia es El!
Dios te bendice!
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