Alegría interior - Lucía Gayón

Reflexionaba sobre lo que es la alegría y puedo ver dos aspectos:

1. La alegría de nuestras emociones, aquello que nos pone contentos pero que se manfiesta como una emoción.  Prueba de que es solo una emoción es que de pronto no "sentimos" la alegría, la cuál puede ser reemplazada por la emoción de tristeza.  Y podemos ir y venir saltando de alegrías a tristezas.  Algo tan sencillo puede echar a andar uno u otra - pero por alguna razón, este tipo de alegría, la que se da en la plataforma de las emociones, no persiste.

2. La alegría que viene como fruto del Espíritu Santo.  Esta es una alegría que nos da confianza, es interior, no está sujeta a los estados emocionales temporales.  Es la alegría de permanecer en el Amor - no es nuestra, se nos presta, pero eternamente.  Para poder identificarla podemos hacerlo cuando la alegría emocional se va y de pronto nos podemos encontrar como tristes.  Es ahí donde podemos saber, que hay algo mucho más, que queda en nosotros. 

A través de nuestra práctica diaria, empezamos a descubrir y a identificar la alegría del Espíritu Santo - necesitamos silencio y disciplina para poder verla.  Y lo maravilloso es que mientras más cerca estemos de identificar esta alegría como fruto del Espíritu, que entonces la alegría "sólida", por decirlo así, empieza a moverse a la otra plataforma emocional. 

No quiere decir que no tengamos tristeza, pero podremos ver que la tristeza es solo un factor movible y que lo permanece es la alegría interior.



Lucía Gayón

Publicado por:
www.permaneceresnsuamor.com