Cuando oramos enfocamos todo nuestro ser al Dios amor cada dia una
renovacion un cantico nuevo en donde la realidad exterior del mundo no
interfiere a nuestra realidad interior que crece en la medida de que
nuestra entrega es mayor esto nos permite vivir el mundo exterior con
mayor tolerancia y humildad encontrar percivir el amor alrededor nuestro
nos llena de alegria.En el silencio contemplamos el amor pues el alma comprometida solo puede corresponder a su creador con su amor pero en un grado muy inferior solo en el silencio podemos escucharlo solo en el silencio todo nuestro ser adora a su creador no existe momentos mas intensos no te cansa estas feliz estas pensando en Dios.
Toda nuestra vida es un continuo peregrinar hacia otra vida es una entrega personal una renuncia continua vivimos de acuerdo al testimonio de confianza que nos da nuestro Dios de amor.
Roberto Oswaldo González Muñoz
Publicado por:
www.permanecerensuamor.com
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